Y de repente lo olvidé.
Tu cara, tus manos,
tus caricias, tus besos,
incluso tu nombre.
Crucé aquella puerta
sin volver la vista atrás.
Sin entender
que la había cerrado.
Sin darme cuenta
de que dejé
mi pasado enterrado.
De que eres todo
lo que tengo
y lo que no.
De que faltaba algo
irremplazable.
Inútilmente busqué
y jamás reencontre.
Ahora sólo espero
en esquinas desoladas
y frías cuan témpano.
Espero a que se enciendan
las llamas del recuerdo.
Y mientras recuerde tu abrazo...
Esperaré.
Tu cara, tus manos,
tus caricias, tus besos,
incluso tu nombre.
Crucé aquella puerta
sin volver la vista atrás.
Sin entender
que la había cerrado.
Sin darme cuenta
de que dejé
mi pasado enterrado.
De que eres todo
lo que tengo
y lo que no.
De que faltaba algo
irremplazable.
Inútilmente busqué
y jamás reencontre.
Ahora sólo espero
en esquinas desoladas
y frías cuan témpano.
Espero a que se enciendan
las llamas del recuerdo.
Y mientras recuerde tu abrazo...
Esperaré.