martes, 11 de noviembre de 2008

Lágrimas de Luna

La Luna me comprende.
Sólo ella me entiende.
Está atada a la Tierra,
igual que yo.
Despedida al alba.
Luna,
deja volar tu alma.
Vuelve a la noche.
Llanto.
Deja de llorar,
que quiero gritar.
¿Si lo hago me oirá?
¿Quién quieres que te oiga?
¿A quién buscas, Luna?
¿A quién?
Quien en la noche perdida
tu llanto escuchara...
Tal vez llorara
igual que las dos.

4 comentarios:

  1. Al lerte me he recordado de esta poesia:

    Por Jaime Sabines

    La luna se puede tomar a cucharadas
    o como una cápsula cada dos horas.
    Es buena como hipnótico y sedante
    y también alivia
    a los que se han intoxicado de filosofía
    Un pedazo de luna en el bolsillo
    es el mejor amuleto que la pata de conejo:
    sirve para encontrar a quien se ama,
    y para alejar a los médicos y las clínicas.
    Se puede dar de postre a los niños
    cuando no se han dormido,
    y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos
    ayudan a bien morir


    Pon una hoja tierna de la luna
    debajo de tu almohada
    y mirarás lo que quieras ver.
    Lleva siempre un frasquito del aire de la luna
    para cuando te ahogues,
    y dale la llave de la luna
    a los presos y a los desencantados.
    Para los condenados a muerte
    y para los condenados a vida
    no hay mejor estimulante que la luna
    en dosis precisas y controladas

    Un beso y un biquiño

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  2. Gracias bella damita por ser como sos! Un beso.

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  3. Bueno si verdaderamente tienes esa edad admiro que escribas asi de bonito.

    Si quieres que te enlace con mi blog dimelo.

    Desde Valladolid en cordial saludo.

    Rocío

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  4. Bueno, en realidad cumplo 15 años el mes que viene.
    Gracias por darme a conocer ese poema, muxica.

    Haz lo que quieras Rocío, pero si me enlazaras con tu blog te lo agradecería.
    Besitos

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